¿Te imaginas poder unir la delicada textura de una cuajada con el delicioso sabor del chocolate negro? Tan solo son necesarios 4 ingredientes, muy poco tiempo (menos de 10 minutos) y conocer todos los trucos que te explicaremos en este artículo.
En la receta de cuajada de chocolate que te presentamos hoy hemos optado por no añadir azúcar, aunque seguirá manteniendo un intenso sabor a chocolate. De esta forma, se trata de un postre light, ideal tanto para aquellas personas que quieren mantener la línea como para diabéticos.
- 900 ml de leche, preferiblemente semi desnatada.
- 40 gramos de cacao en polvo desgrasado ecológico.
- Edulcorante bajo en calorías apto para elaboraciones calientes, por ejemplo stevia o maltitol.
- 2 sobres de cuajada de supermercado.
La cantidad de edulcorante dependerá del tipo que elijas y de tu gusto. Recuerda que la stevia tiene 0 calorías y que se estima que es de 250 a 300 veces más dulce que el azúcar. Dependiendo de la marca y el tipo de stevia que compres, puedes usar entre 1/8 y 1/2 cucharadita de stevia por cada cucharadita de azúcar que uses normalmente.
El cacao en polvo de Torras no tiene azúcares añadidos y es ecológico. Su cantidad también es orientativa, ya que si queremos una cuajada más suave, podemos reducir los gramos de cacao a la mitad.
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- Pon aproximadamente 650 ml de leche en un cazo y el resto en un cuenco o un vaso.
- En el cazo, vierte el cacao en polvo y el edulcorante. Llévalo al fuego a temperatura media-alta hasta que llegue a su punto de ebullición, removiendo de vez en cuando.
- En el cuenco con el resto de la leche, añade el contenido de los dos sobres de cuajada y bátelo hasta que se disuelva.
- Una vez que la leche del cazo hierva, retíralo del fuego e incorpora la leche con la cuajada disuelta en el cazo. Remueve bien.
- Vuelve a llevarlo al fuego y deja que rompa a hervir de nuevo, sin dejar de remover con unas varillas.
- Una vez que vuelva a entrar en ebullición, retira el cazo del fuego y cuela la mezcla para que no tenga grumos.
- Reparte la mezcla en varios vasos de cuajada (unos 6 aproximadamente) y déjalos enfriar, primero a temperatura ambiente y después en el frigorífico.
- Una vez que ya haya cogido cuerpo, ya se podrá disfrutar.
Ya sea como un postre ligero o una merienda de chocolate, tu cuajada baja en calorías seguro que hará las delicias tanto de los mayores como de los peques de la casa. ¡A disfrutarla!