El helado de comtessa es un postre muy típico en las mesas durante celebraciones y comidas familiares en nuestro país.
En esta ocasión queremos hacer un pequeño flashback al pasado y recordar esas comidas con tanta gente y platillos que iban y venían, con esa porción de tarta helada, que algunos adultos bañaban con su alcohol predilecto,.
Ni más ni menos, el helado comtessa ha sido testigo de innumerables sobremesas y cafés en nuestros hogares, así que es momento de que puedas recrear ese recuerdo con la receta de comtessa que te dejamos a continuación, uno de los helados y postres más familiares.
Receta de comtessa, el helado más familiar
Si quieres recordar momentos de antaño y volver a sentir ese momento familiar, o tienes una comida familiar y quieres sorprender a todo el mundo, ahora lo puedes hacer con la receta más parecida al helado de comtessa original, o tarta helada, toma nota.
Instrucciones paso a paso para hacer helado de comtessa
Para la capa de nata, bate la nata para montar con el azúcar glass y el extracto de vainilla hasta que obtengas picos suaves y firmes.
Vierte la nata batida en un molde desmontable, puede ser redondo o rectangular. Si eliges un molde que sea redondo, puedes optar por uno de 23 cm de diámetro aproximadamente, ya que es el tamaño de un plato estándar, en este momento es importante que te asegures de extender la nata de manera uniforme para formar la primera capa de la tarta helada.
Para la capa de chocolate, derrite el chocolate negro para postres junto con la leche y el azúcar en una cacerola a fuego medio-bajo, removiendo constantemente hasta que el chocolate esté completamente derretido y todos los ingredientes se hayan integrado.
Deja que la mezcla de chocolate se enfríe a temperatura ambiente y luego viértela sobre la capa de nata en el molde.
Cubre el molde con papel film o papel de aluminio y lleva la tarta al congelador durante al menos 4 horas o el tiempo suficiente, dependiendo de la potencia de tu congelador, hasta que esté completamente firme.
Una vez que la tarta helada esté bien congelada, retira el papel film o papel de aluminio y desmonta el molde.
Transfiere la tarta a un plato de servir y decora al gusto con virutas de chocolate o nata montada. De manera opcional le puedes añadir un poco de sirope o caramelo, e incluso un poco de chocolate fundido, además de frutos secos, que junto con el contraste de texturas y sabores queda sensacional.
Deja que la tarta helada repose a temperatura ambiente durante unos minutos antes de cortarla y servirla.
+2 horas
fácil
8 raciones
