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Chocolate y embarazo: pros y contras

Tiempo de lectura: 4 minutos

Todos queremos una vida sana y cada vez más nos preocupamos más por la alimentación y los buenos hábitos de vida. A pesar del interés general, hay algunos momentos en la vida en los que una buena alimentación no es un capricho, es un deber; como si estás pasando por una enfermedad, a medida que envejecemos o en el caso de las mujeres embarazadas. 

Durante el embarazo, es normal tener dudas sobre qué alimentos son seguros, cuáles conviene limitar y cuáles es mejor evitar. El chocolate es uno de esos placeres que muchas mujeres embarazadas se preguntan si deben dejar de lado o si pueden seguir disfrutando con tranquilidad. 

En este artículo vamos a contarte, de forma clara y con base científica, todo lo que debes saber sobre el binomio chocolate y embarazo: sus beneficios, las cantidades recomendadas y algunos consejos prácticos para disfrutarlo sin preocupaciones.

Qué dice la ciencia sobre el chocolate durante el embarazo

Aunque chocolate y embarazo suelen asociarse a caprichos o tentaciones, lo cierto es que el chocolate contiene compuestos bioactivos como los flavonoides o la teobromina que pueden tener efectos positivos si se consume con moderación. Si quieres saber más sobre qué son los flavonoides y el valor nutricional del chocolate puedes hacerlo en nuestro blog

La relación entre el chocolate y el embarazo ha sido objeto de estudio por parte de diversas universidades y organismos de salud pública, que han analizado sus posibles beneficios y riesgos durante la gestación.

Por ejemplo, investigaciones recientes han sugerido que el chocolate negro, rico en flavonoides, podría ayudar a mejorar la circulación sanguínea y reducir ciertos riesgos asociados al embarazo, como la preeclampsia. Eso sí, no todo es blanco o negro: también es importante tener en cuenta el tipo de chocolate y la cantidad que se toma.

Beneficios del chocolate en el embarazo

Tomado con sensatez, el chocolate y embarazo pueden ser un buen match y aportar una serie de ventajas interesantes para la salud de la madre y el bebé. Aquí te contamos los principales beneficios:

  • Antioxidantes naturales: el chocolate negro, especialmente el que tiene más de un 70 % de cacao, contiene polifenoles y flavonoides que ayudan a combatir el estrés oxidativo.
  • Mejora del estado de ánimo: gracias a compuestos como la feniletilamina o la teobromina, el chocolate puede levantar el ánimo y combatir esos altibajos emocionales tan comunes durante la gestación.
  • Posible reducción del riesgo de preeclampsia: algunos estudios han relacionado el consumo moderado de chocolate con una menor incidencia de esta complicación, que afecta a la presión arterial de la madre.
  • Mejor circulación sanguínea: el cacao estimula la dilatación de los vasos sanguíneos, favoreciendo el riego sanguíneo y la oxigenación.

Riesgos y contraindicaciones del chocolate en embarazadas

A pesar de sus beneficios, no conviene olvidar que el chocolate debe tomarse con moderación y vigilando aspectos como pueden ser: 

  • Cafeína en exceso: aunque en menor cantidad que el café, el chocolate también contiene cafeína, y un consumo elevado puede dificultar algo el sueño si eres de esas personas a las que la cafeína les afecta mucho, estés o no embarazada. 
  • Problemas digestivos: algunas embarazadas experimentan acidez o digestiones pesadas, y el chocolate, especialmente el con leche, puede agravar estos síntomas.
  • Azúcares añadidos: muchos chocolates comerciales tienen una cantidad elevada de azúcar, lo que puede favorecer el aumento de peso, asegúrate de que escoges chocolates sin azúcar o con muy poca cantidad. 
  • Presencia de aditivos: los chocolates procesados pueden contener grasas hidrogenadas, colorantes o conservantes poco recomendables durante el embarazo, puedes evitar estos aditivos si buscas chocolates ecológicos y chocolates orgánicos.

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Cantidad recomendada de chocolate durante el embarazo

No hay una cantidad única de chocolate en el embarazo que valga para todas, pero los expertos en nutrición coinciden en que un consumo moderado, por ejemplo, entre 20 y 30 gramos de chocolate negro al día, resulta seguro para la mayoría de mujeres embarazadas. 

Eso sí, cuando hablamos de chocolate y embarazo, es importante tener en cuenta que la tolerancia puede variar según la persona y también según el trimestre. 

Durante los primeros meses, cuando las náuseas y el malestar digestivo son más frecuentes, conviene ser más prudente. Más adelante, a medida que avanza la gestación, puede valorarse un ligero aumento en la cantidad, siempre prestando atención a las señales del cuerpo.

Tipos de chocolate: ¿Cuál es mejor durante el embarazo?

Chocolate y embarazo son buenos compañeros pero elegir bien puede marcar la diferencia entre un capricho saludable y uno que no lo es tanto.

  • Chocolate negro: el chocolate negro es el más recomendado, ya que contiene más cacao y menos azúcar. Cuanto mayor sea el porcentaje de cacao (preferiblemente por encima del 70 %), mejor.
  • Chocolate con leche: el chocolate con leche contiene más azúcares y grasas añadidas, y menos antioxidantes. Se puede tomar, pero en menor cantidad.
  • Chocolate blanco: puede que dudes de si el chocolate blanco es malo o sano. Es cierto que no contiene cacao sólido, pero su contenido de manteca de cacao y vitaminas, también es beneficioso. No le tengas miedo al chocolate blanco durante la gestación si es tu preferido, eso sí, vigila el consumo por su mayor contenido graso.

Consejos para un mix perfecto de chocolate y embarazo

Si no quieres renunciar al chocolate durante estos meses, te dejamos algunos consejos prácticos para disfrutarlo con seguridad:

  1. Lee las etiquetas: evita productos con muchos ingredientes artificiales, aceites vegetales poco saludables o azúcar como primer componente, saber leer las etiquetas de comida puede ayudarte tanto en la duda de si es bueno unir chocolate y embarazo, como en el resto de los alimentos que comas durante la gestación.
  2. Escoge el momento adecuado: tomar chocolate a primera hora de la tarde puede ayudar a mantener el ánimo sin afectar al sueño nocturno.
  3. No te sientas culpable: si lo tomas con cabeza, no hay motivo para eliminarlo por completo de tu dieta. De hecho, puede ser un pequeño placer diario que te haga sentir bien.
  4. Combínalo con alimentos saludables: puedes fundirlo con frutas, usarlo en yogures naturales o integrarlo en recetas caseras más equilibradas.

Es posible disfrutar del chocolate y el embarazo sin problemas

Como ves, chocolate y embarazo no tienen porqué estar reñidos. Al contrario, disfrutar de un poco de chocolate cada día puede aportar beneficios, tanto físicos como emocionales. La clave está en hacerlo con moderación, eligiendo bien el tipo de chocolate y prestando atención a cómo reacciona tu cuerpo.

No se trata de renunciar a todo, sino de cuidarte con equilibrio y sentido común. Si tienes dudas o alguna condición médica concreta, lo mejor es hablar con tu matrona o ginecólogo, que sabrá orientarte según tu caso. 

Mientras tanto, recuerda que el chocolate y embarazo no están reñidos: puedes seguir disfrutando de ese pequeño placer… sin remordimientos.

 

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