Seguro que alguna vez has comprobado que después de un tiempo almacenando el chocolate en tu nevera o despensa, este adquiere un ligero tono blanquecino o incluso apreciar unas pequeñas marcas blancas.
La mayoría de la gente tiende a pensar que esto sucede porque el chocolate está en mal estado o ha perdido parte de sus propiedades. Sin embargo, la causa de estas marcas blanquecinas es algo más compleja y no es tan perjudicial como puede parecer a priori.
Desde Torras queremos arrojar algo de luz para esclarecer cuáles son los motivos de este fenómeno, por eso en este post te vamos a explicar detalladamente todo lo que debes saber, ¡sigue leyendo!
¿Por qué salen manchas blancas en el chocolate?
El tono blanquecino del chocolate puede estar provocado por distintos factores.
Según han demostrado numerosos estudios científicos, este fenómeno podría tener su origen en la grasa presente en la manteca de cacao del chocolate. Los cambios de temperatura o los entornos demasiado cálidos bruscos provocan que esta grasa se acabe separando del resto de ingredientes y acabe filtrándose hasta la superficie a través de pequeñas grietas, cristalizándose finalmente con ese tono blanquecino que tan familiar nos resulta.
Este fenómeno ocurre sobre todo en chocolates con un alto contenido en grasas vegetales y aquellos chocolates con frutos secos mezclados que aportan una dosis extra de grasa al producto.
Otro de los motivos de estas marcas blancas podría ser la exudación del azúcar presente en el chocolate, algo que ocurre en climas o entornos con un alto nivel de humedad. En estos casos, el azúcar del chocolate se disuelve y “suda” hacia la superficie, cristalizándose también con el característico tono pálido que ya conocemos.
¿Se puede comer el chocolate cuando se pone blanco?
Lo cierto es que el tono blanquecino que puede adquirir el chocolate no afecta para nada a la calidad de sus ingredientes ni significa que esté en mal estado, por lo que se puede comer perfectamente.
Además, en la mayoría de las ocasiones su sabor no se ve alterado, aunque sí puede hacerlo su textura y aroma, provocando que pierda intensidad y se vuelva más duro.
En conclusión, cuando nos preguntamos si se puede comer el chocolate cuando se pone blanco, la respuesta es que sí, ya que aunque algunas de sus características pueden verse afectadas, sigue conservando su sabor y no supone ningún riesgo para la salud.
¿Cómo evitar que el chocolate se ponga blanco?
Lo ideal para evitar que el chocolate adquiera esta cristalización es conservarlo siempre en un lugar fresco y seco, con una temperatura que oscile entre los 14 y los 18 grados y evitando exponerlo a cambios bruscos de temperatura.
Además, para evitar también que pierda su aroma, es aconsejable guardarlo siempre cubierto, ya que de esta manera evitaremos que se mezcle con otros alimentos.
Por otra parte, también puedes prevenir este problema comprando chocolates con un bajo porcentaje de azúcares y grasas, que son los componentes que provocan la cristalización blanquecina en la mayoría de los casos. En Torras contamos con un amplio catálogo de chocolates naturales como nuestro chocolate negro 72% de cacao sin azúcar o nuestro negro sin azúcar 95%, entre muchos otros, que podrás encontrar en nuestra tienda online.